El mercado laboral ha alcanzado un nuevo punto máximo gracias a un incremento de 603,900 ocupados entre abril y junio, la cifra más alta para este período, y una reducción del desempleo de 365,300 personas.
Por primera vez en la historia, España ha llegado a los 21 millones de trabajadores durante el segundo trimestre del año, estableciendo un nuevo récord histórico en el mercado laboral. Estos datos se basan en las últimas cifras de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicadas este jueves. Además, se ha registrado una disminución récord en el número de desempleados, con 365,300 personas menos sin trabajo, lo que sitúa la cifra total de desempleados en 2,762,000, el dato más bajo desde 2008.
En concreto, la cifra más alta de trabajadores alcanzó los 21,056,700, según los datos publicados esta mañana por el INE, lo cual es destacado como «la cifra más alta en la serie histórica de la encuesta» por el organismo.
El segundo trimestre del año, comprendido entre abril y junio, ha arrojado resultados muy positivos tanto en el empleo, con un aumento sin precedentes durante este período de aumento habitual de trabajadores, como en la fuerte reducción del desempleo. También se ha observado un aumento de la población activa, que ha superado los 23.8 millones de personas, lo que marca otro récord histórico que refleja la confianza de los trabajadores en encontrar empleo, según ha destacado el Ministerio de Economía.
En consecuencia, la tasa de desempleo se ha reducido hasta alcanzar el 11.6%, la más baja en los últimos 15 años desde 2008. Esto se debe tanto a la disminución del número de personas en paro como al aumento de la población activa en el mercado laboral. A pesar de los récords en empleo, esta tasa no disminuye más debido a que hay más personas dispuestas a trabajar dentro del mercado laboral.
El impulso en el empleo durante el segundo trimestre del año es común debido al buen tiempo, la Semana Santa (cuando cae en abril, como ha sido este año) y el inicio de la temporada turística, entre otros factores, que se traducen en un aumento de trabajadores y una disminución del desempleo.
En este año en particular, el impulso en el empleo que ha llevado a alcanzar la cifra récord de 21 millones de trabajadores ha sido significativo, con un incremento de 603,900 personas ocupadas. El sector privado ha sido el principal responsable de este crecimiento, ya que el empleo ha aumentado en 610,100 personas en este sector, mientras que ha disminuido en 6,200 personas en el sector público, según las cifras del INE.
Respecto al desempleo, es destacable la reducción en el número de hogares en los que todos sus miembros en edad de trabajar están desempleados. Durante este trimestre, se han reducido en 139,300, lo que ha llevado este dato de gran precariedad a estar por debajo del millón de hogares, con un total de 916,000 hogares en esta situación. De estos, 290,700 son hogares unipersonales, según explica el INE.
Por sectores, el empleo ha aumentado principalmente en los servicios, con 606,000 personas ocupadas más. La construcción ha registrado un aumento de 60,900 trabajadores, seguida a gran distancia por la agricultura con 1,500 ocupados adicionales. Por otro lado, la industria ha experimentado una disminución del empleo, con 64,500 personas ocupadas menos.
El número de trabajadores autónomos ha experimentado un notable aumento durante este trimestre, con un incremento de 97,300 personas, alcanzando un total de 3.2 millones de trabajadores por cuenta propia. En los últimos doce meses, se ha producido un aumento de 44,000 trabajadores autónomos.
Otra noticia destacada en el mercado laboral, además del récord en trabajadores, es que ha habido un gran descenso en el número de personas con contratos temporales y un aumento en el número de trabajadores con contratos indefinidos, tras la reforma laboral. Los asalariados han aumentado en 505,500 personas durante el segundo trimestre, de las cuales 410,100 tienen contratos indefinidos, alcanzando un nuevo máximo de 14.8 millones de personas. Por otra parte, ha habido 95,400 trabajadores más con contratos temporales.
Estos cambios se producen después de la aprobación de la reforma laboral, que ha logrado reducir el empleo temporal, uno de los problemas más importantes en el mercado laboral español, y situar la tasa de temporalidad en mínimos del 17.3%, según los datos de la EPA.