La sentencia del Tribunal Superior es pionera y condena a la empresa, y servirá para poner fin a más amenazas veladas de nuevos ERTE
La defensa de los derechos de los trabajadores a menudo pasa por los tribunales de justicia, cuando la cerrazón de la empresa impide la negociación o el acuerdo. En este caso, nos encontramos ante un caso de clarísimo abuso de posición, ya que sobrepasando la capacidad de la legislación otorga a las empresas para la organización de su actividad y de su fuerza laboral, se cercenan derechos de los trabajadores, pasando por encima de las personas sin la más mínima consideración.
Por fortuna, los tribunales de justicia suelen poner las cosas en su sitio, y aunque con frecuencia se hagan esperar, todo llega y, como en este caso, la sentencia ha condenado a la empresa por la realización de un ERTE COVID ilegal, de acuerdo al fallo de Tribunal Superior de Justicia de Canarias.
Hablamos de la empresa Terminales Canarios SL, que suministra en Canarias el combustible a puertos y aeropuertos, y que en plena pandemia y sin amparo legal para ello, impuso un ERTE unilateral a su plantilla, sin causa justificada.
SITCA interpuso la correspondiente demanda judicial pues entendíamos que el ERTE no era legal, y que se cometía un abuso de posición sobre esta plantilla, sin que hubiera justificación para ello desde nuestro punto de vista, y tal y como ahora corrobora el TSJC.
A modo de resumen, la sentencia establece que “en el caso que nos ocupa es evidente que la comunicación individual al trabajador está yerma de especificidad de causas o razones en las que se sustenta la reducción temporal de la jornada, por lo que [] no ha quedado justificada la medida adoptada”. Dicho de otra manera, no se comunicó al trabajador las justificaciones concretas que avalaran el ERTE.
Se da la circunstancia de que esta sentencia, la 1329/2022 del TSJC es pionera al ser la primera que condena a una empresa, y desde luego habrá de sentar jurisprudencia de forma muy positiva para evitar nuevos avisos, como el de varias empresas vinculadas al sector de los hidrocarburos en Canarias, que amenazaron veladamente a sus plantillas con la realización de ERTES, a menudo para forzar la aceptación de peores condiciones laborales.
Desde SITCA queremos reafirmar que en la defensa de los derechos laborales, sociales y económicos de los trabajadores no daremos nunca un paso atrás, y cuando no nos quede más alternativa, acudiremos a donde haga falta, hasta las últimas consecuencias, para doblegar las acciones ilegales de aquellas empresas que han convertido el abuso de sus trabajadores en su práctica habitual.
Seguimos en la lucha.