SITCA CIERRA EL AÑO 2022 CON EL MAYOR CRECIMIENTO DE SU HISTORIA

Pese a las convulsiones de este accidentado 2022, marcado por la incertidumbre económica y las tensiones internacionales, SITCA ha sabido llegar a más y más trabajadores, registrando importante crecimiento en todos los valores

Cuando creíamos que empezábamos a recuperar un poco de normalidad, nuevos sobresaltos llegaron a la vida de trabajadores y familias para volvernos a poner a prueba, incluida nuestra Central Sindical, ya que en SITCA nos hemos convertido en verdaderos expertos en adaptarnos a los cambios repentinos, para poder seguir dando nuestro servicio de asesoramiento y apoyo a todos los trabajadores que lo necesitan.

A la crisis económica post pandemia se ha unido la inflación desbocada, sobre todo en los productos básicos, que pone a la clase trabajadora contra las cuerdas, agravada además por la agresión de Rusia a Ucrania y la consecuente guerra. Las tensiones en la cadena de suministros y el encarecimiento de materias primas y de la energía han terminado por crear un cóctel de inestabilidad económica que repercute de forma directa en toda la sociedad, sobre todo en los trabajadores.

La pandemia, ya lo sabemos, ha llegado para quedarse, ahora como un virus respiratorio más, siempre y cuando no tengamos nuevas sorpresas. Convivimos con el virus, para no terminar de asfixiar nuestra economía y los empleos que de ella dependen. Son tiempos de adaptación a una nueva realidad, que, pese a todo, ya no es igual que la anterior al COVID.

En SITCA también hemos hecho grandes esfuerzos para reinventarnos casi a diario, reajustarnos, innovar y ser imaginativos para poder dar respuesta a una situación, o más bien a una sucesión de situaciones, que nos han pillado a todos con el pie cambiado. Por suerte, nuestra gran capacidad de reflejos y nuestra agilidad a la hora de tomar decisiones innovadoras nos ha servido para, pese a todo, registrar importantes datos de crecimiento tanto en afiliación como en número de delegados y en sectores en los que estamos presentes. De hecho, estamos ante el mayor crecimiento de la historia de SITCA.

Salir de una pandemia para entrar de lleno en una crisis económica y energética es algo sin precedentes en nuestra historia, y SITCA ha superado favorablemente este gran reto, precisamente gracias a nuestra capacidad de poner en marcha nuevos métodos de trabajo que nos aporten mayor eficacia.

Y es que nuestra labor de asesoramiento, gestión, e incluso acompañamiento a nuestros afiliados, en situaciones humanamente muy complicadas, no sólo no se ha reducido, sino que ha crecido exponencialmente al ritmo que crecía las preocupaciones y la incertidumbre de miles y miles de trabajadores.

Una de las peores consecuencias de la situación que estamos viviendo es, precisamente, el alto nivel de incertidumbre que se ha instalado en nuestra sociedad, sin una perspectiva clara ni un horizonte despejado para una clase trabajadora que ve cómo la inflación se come su calidad de vida sin que parezca haber un posible remedio a la vista, y cómo llenar el carro del súper cuesta de media un 16% más que hace un año. Pero los sueldos no han subido un 16%. Dicho de otro modo. Somos un 16% más pobres.

En este escenario, la actuación de un sindicato cercano a las personas, que vive en contacto directo con la realidad del día a día, como es el caso de SITCA, se convierte a veces en la única tabla de salvación para miles de trabajadores. Lo sabemos, y ese es el reto que hemos asumido gustosamente, aunque para ello hayamos tenido que multiplicarnos y sacar horas y horas de trabajo de donde no había, para no dejar a ninguno de nuestros afiliados sin la atención que merecen.

Nos gusta pensar que en ésta forma nuestra de ejercer el sindicalismo se esconde la razón del increíble éxito que hemos experimentado en un año tan complicado, insistimos, creciendo de forma histórica, tanto afiliados como delegados de personal y en sectores donde estamos presentes.

Y todo ello en un clima generalizado de debilitamiento de las estructuras sindicales en muchas empresas, con recortes de plantilla o ERTES, cuando no directamente con cierre patronal, con todo lo que ello conlleva de temores a la hora de organizar elecciones sindicales. Pues bien, pese a todos estos obstáculos, hemos crecido más de un 32% en número de delegados y en colectivos que ha pasado a formar parte de la familia de SITCA.

Hemos logrado nuestro objetivo de reforzarnos como la alternativa sindical de referencia en todas las Islas Canarias, en incluso en la Península, siendo muy significativa y determinante nuestra presencia en Gran Canaria, Tenerife, Lanzarote, Fuerteventura, La Palma y Madrid.

Y como ningún balance anual estaría completo sin aportar algunos datos, sirvan de ejemplo y son los que le exponemos a continuación:

-Más de 34% de incremento de afiliación.
-Más del 32% en crecimiento de delegados y colectivos que se pasan a SITCA.
-Más 24 convenios firmados.
-Nuestros servicios jurídicos tramitaron más de 3800 expedientes de demandas, conflictos colectivos, denuncias a la inspección, etc. (récord histórico).
-Más de 15 preavisos de huelga.
-Más de 20 ERTE negociados.
-Más de 6.000 consultas atendidas.
-Más de 90 planes de igualdad negociados.
-Más de 20 colectivos nuevos que se incorporan a SITCA

Estas cifras, en su adecuado contexto de la situación que vive la sociedad, y a la que como sindicato no somos ajenos, viene a confirmar nuevamente el éxito de nuestra apuesta por la innovación, la flexibilidad y la capacidad de nuestro equipo humano para reaccionar a las circunstancias con agilidad y poner en marcha procedimientos y métodos que nos permitan seguir al pie del cañón, aunque bien es cierto que con una gran esfuerzo por parte de toda la familia de SITCA, del que estamos totalmente orgullosos.

Estos resultados significan que hemos logrado prestar asistencia jurídica, social, laboral y de cualquier índole a muchísimos trabajadores, que han visto salvaguardados sus derechos gracias a la intervención de SITCA.

Éste es, sin duda alguna, el dato más importante de cualquier balance anual, el éxito en la protección de los derechos laborales y sociales de los trabajadores. Es el dato que aspiramos a proporcionar nuevamente en el próximo balance anual.

Con estos números, y con lo que nos transmiten nuestros afiliados en el día a día, SITCA confirma nuevamente que es un sindicato de clase serio, solvente, eficaz, que logra mejoras concretas y palpables y que en última instancia, somos de utilidad para la sociedad, que es de lo que se trata, ser útil a nuestra sociedad, a través de la defensa de los derechos de los trabajadores, aportando así nuestro granito de arena a la construcción de una sociedad más justa desde el punto de vista social.

Desde estas líneas queremos, por último, agradecer y reconocer el gran trabajo del equipo de SITCA y de todos y cada uno de nuestros delegados y militantes, ya que sin ellos no habríamos logrado estos resultados tan sorprendentes e históricos.

Seguimos en la lucha.